¿Todas tenemos recuerdos de cosas de muy chiquitas? Hay algunas cosas que me acuerdo desde los 4, no sé por qué, como las piernas de una empleada que tuvimos en la casa. También me acuerdo del día en que conocí a mi hermano, del piso de baldosa blanco con piedritas de mármol incrustadas y pulidas que había en el hospital. Me acuerdo de algunas cosas del jardín, de la Ronda de los niños, como el día que me vistieron de blanco y parecía un ángel. Me acuerdo de una vez que estábamos haciendo una pintura o algo y la profesora nos dijo que lo firmáramos. Pero ¿cómo, profe? Si no sabemos escribir. Pueden calcar su nombre del que está escrito en el pupitre.
M A R Í A D A N I E L A Z U L U A G A A.
Decía el mío con letra cursiva y arabescos tipo firma de princesa de Disney.
Puse el papel con la pintura sobre eso que era mi nombre escrito y lo calqué por encima con un color café. Era la primera vez que yo escribía algo y era, justamente, la manera por la que me llamaban a mí. La pintura queda como una mancha en la cabeza, pero ese trazo tembloroso con mi nombre yo creo que nunca se me va a olvidar. La obra de arte era lo escrito. Las líneas que nombraban lo que era yo y también al mundo, al resto de las cosas.
Todo esto para decirles que qué video lo que es la escritura. Qué video una poder poner tu pensamiento en líneas que, sobre un papel o cualquier cosa, significan algo para otra que las ve y las puede entender. Qué mágico poder comunicarnos así y así entrar en conversación con tantas otras personas de tantas otras partes. Eso es algo que a mí me quedó marcado muy adentro y creo que por eso fue que escogí la escritura como el medio de expresarme, en el que me siento mejor. Esto, por su puesto, no niega que haya otras formas (ya rayaría de muy logocéntrica yo), pero sin duda lo que pasa ahí, cuando una escribe, es asombroso.
Y bueno, no es más por hoy. ¿Qué les hace pensar a ustedes? ¿Cómo es la relación suya con la escritura?
Hasta el otro miércoles, si es que Dios se porta misericordioso conmigo y no me quita este tiempo para mí tan preciado de escribir estas líneas.